El Índice de confianza al consumidor ha bajado casi un diez por ciento en doce meses, y hoy la Bolsa no ha llegado a caer un punto entero por tan sólo unas decimillas, pero tranquilos... en unas horas sabremos si hemos sido buenos o no este año y suena Fuck this shit, de Belle and Sebastian.
Everything is so cool now!
Te recuerdo diciéndome que los Reyes no eran los Reyes. Era verano, y eras tan guapa que me resistía a creerlo. Lo de los Reyes. Te recuerdo a ti, Bro, dándome una explicación convincente sobre por qué podían estar en una tarde como hoy en tantas cabalgatas a la vez. Joder, olvidé que eran magos. Recuerdo esa nave hecha en tente para que la vieran y nos dijeran cuál les había gustado más, si la tuya o la mía. No sé por qué no hubo respuesta: la mía era evidentemente más espectacular. Recuerdo cuando pregunté si era verdad. Estaba en el baño con mi madre, y creo que respiró aliviada cuando admitió que sí. "Ya era hora", tuvo que pensar.
Un inocente menos...
Los cinco de enero todo es estrés de última hora y cabreo cada vez que veo a un concejal pintado de betún con cara de 'soyguay', pero tranquilos... en unas horas todo habrá merecido la pena, porque es de los pocos días que tenemos para demostrar que los demás nos importan más allá de acciones, palabras y detalles a deshora. ¿Y qué hay de malo? Soy el primero al que le pone cachondo eso de los zapatos bajo el árbol y esperar a ver qué sucede.
Y sucede que la realeza ha vuelto a ganar al tío de los renos. Llamadme tradicional.
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